El pasado miércoles una mujer de 41 años traía al mundo (por cesárea, eso sí) en el hospital de Medan, al noreste de la isla de Sumatra (Indonesia) a un "pequeñuelo" de nada más y nada menos que 8,7 kilos (un peso correspondiente a un bebé de un año) y 62 centímetros de estatura.
Es curioso comparar al bebé con otros recién nacidos de envergadura media.
Cabe señalar que el bebé vino completamente sano, a pesar de que al nacer tuvo problemas para respirar y se le tuvo que administrar oxígeno. La mamá también se encuentra en perfecto estado, aunque los médicos aseguran que la diabetes que padece desde hace años ha podido tener algo que ver con el tamaño de su hijo.
No es de extrañar que con ese tamaño el "pequeñín" haya estableciendo un nuevo récord nacional en cuanto al niño recién nacido más pesado, aunque a nivel mundial el puesto número uno le sigue perteneciendo a un bebé canadiense que nació en 1879 con 10,8 kilos que, desgraciadamente, murió 11 horas después.
Casi da miedo quedarse embarazada viendo estos datos...
Es curioso comparar al bebé con otros recién nacidos de envergadura media.
Foto: REUTERS | Vista en El Mundo.
Cabe señalar que el bebé vino completamente sano, a pesar de que al nacer tuvo problemas para respirar y se le tuvo que administrar oxígeno. La mamá también se encuentra en perfecto estado, aunque los médicos aseguran que la diabetes que padece desde hace años ha podido tener algo que ver con el tamaño de su hijo.
No es de extrañar que con ese tamaño el "pequeñín" haya estableciendo un nuevo récord nacional en cuanto al niño recién nacido más pesado, aunque a nivel mundial el puesto número uno le sigue perteneciendo a un bebé canadiense que nació en 1879 con 10,8 kilos que, desgraciadamente, murió 11 horas después.
Casi da miedo quedarse embarazada viendo estos datos...