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¿Por qué papá y mamá no tienen trabajo?


Tras los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, "Barrio Sésamo" ofreció un especial en el que animaban a los pequeños a desahogarse después de lo ocurrido. Posteriormente se dedicó otro especial que trataba sobre las consecuencias que tiene la guerra en las familias de los militares destinados a conflictos bélicos.

Ahora, a Gary Knell, consejero delegado de Sesame Workshop, entidad sin ánimo de lucro que se encuentra actualmente detrás del exitoso programa, se le ha ocurrido que son muchas las familias que conocen de primera mano los efectos de la crisis a las cuales les gustaría ayudar.

Con esa precisa intención y tratando de conseguir que padres e hijos conversen más sobre las finanzas del hogar, se ofrecerá el próximo 9 de septiembre a través del canal público PBS en Estados Unidos otro capítulo especial del mítico programa televisivo que en esta ocasión se llamará "Las familias se mantienen unidas: Sentirse seguros en tiempos difíciles" y estará protagonizado principalmente por Elmo, quien ofrecerá a los pequeños trucos para ahorrar y les explicará por qué papá o mamá ya no tienen trabajo.


Además de los muñecos y la colaboración de dos expertos en economía y relaciones familiares, este especial cuenta las historias reales que han vivido varios niños y sus familias, llegando a conseguirse, según el propio Knell, un espacio "equilibrado, que no es deprimente, ni tampoco presenta el asunto de manera trivial. Será tan divertido como siempre y mandará un mensaje de optimismo, pero real, a las familias".


Aunque todavía tendremos que esperar para poder verlo y hablar con propiedad, el especial estará disponible también doblado en español en la web del propio espacio de televisión, junto a material educativo complementario.

¿Qué os parece la iniciativa?

Un director muy precoz

Británico de seis años nombrado "director de diversión" de un museo.

Un niño británico de seis años se convirtió en el "director de diversión" del Museo Nacional del Ferrocarril de la localidad de York. El pequeño Sam Pointon, fan de los trenes, escribió al museo de la ciudad del norte de Inglaterra para solicitar el cargo de director del museo.

Foto: Kippa Matthews/ EFE | Vista en El Mundo.

"Sólo tengo seis años, pero puedo hacer el trabajo. Tengo un tren eléctrico y soy bueno, puedo controlar dos trenes al mismo tiempo", decía el pequeño.

El escrito impactó tanto a los directivos del museo que decidieron concederle el puesto de "Director of Fun".

"Es el mejor trabajo del mundo", comentó el pequeño, a quien impresiona sobre todo la locomotora de vapor. "Ya he estado en muchos trenes, incluso en el Eurostar". Pese a conseguir el trabajo de sus sueños, Sam tendrá que seguir estudiando, bromeó su madre.


Visto en EMOL.com

Cuidado con las carnes procesadas

Un nuevo informe del Fondo Mundial de Investigación de Cáncer (WCRF) advierte que los niños que consumen grandes cantidades de ciertas carnes procesadas (que incluyen al jamón, al tocino, salami, pastrami y algunos tipos de salchichas, así como a las hamburguesas si están conservadas con sal o aditivos químicos) tienen mayor riesgo de desarrollar cáncer de colon y recto a lo largo de su vida, ya que durante el proceso de curar, salar o agregar conservadores a la carne se pueden introducir también agentes cancerígenos.

Durante los últimos años se ha podido demostrar el vínculo entre el consumo de carnes procesadas y el cáncer colorectal en adultos, mientras que algunos estudios afirman que miles de casos de esta enfermedad podrían evitarse si toda la gente limitara su consumo de estos alimentos a 70 gramos a la semana.

Sin embargo, y apesar de que hasta ahora sólo se ha obtenido evidencia con el estudio de las dietas de los adultos, el WCRF afirma que los malos hábitos alimenticios pueden comenzar en la infancia.

Los especialistas recomiendan por ello cambiar el relleno y las bebidas azucaradas que a menudo se incluyen en el almuerzo escolar.


Y es que a pesar de que preparar el almuerzo escolar con determinados productos de altas calorías podría ser una opción conveniente para los padres que no cuentan con mucho tiempo para preparar estos alimentos, lo cierto es que no no se necesita mucho tiempo ni esfuerzo para preparar un almuerzo saludable: para rellenear los sandwiches se pueden utilizar tomate o una ensalada (contando esta como una de las cinco porciones de frutas y verduras que los niños deben consumir diariamente), así como pollo sin procesar, pescado, o queso bajo en grasa y, por supuesto, también se pueden sustituir las bebidas azucaradas por zumos de fruta.

La intención es que que así los niños puedan aprender a ver este tipo de alimentos como un antojo ocasional.

Así, aparte de estar ahorrándoles un posible riesgo y educándoles sobre una dieta rica y variado, también estaremos reduciendo las posibilidades de que nuestro pequeño pueda desarrollar sobrepeso.

Merece la pena el esfuerzo.

El amor es la fórmula

Carlos González es un pediatra autor de varios libros sobre crianza infantil en los que expone y defiende la crianza con apego desde un punto de vista natural y divertido en muchos casos.
Le da un palo al Doctor Estivil con su cruel y bárbaro método, consistente en dejar llorar a los niños hasta que se duerman, en dejarlos solos y despegarlos de lo que es instintamente normal y natural, su madre.

Personalmente he de decir que la razón principal por la cual se me ocurrió crear este blog fue mi indignación al oír a mi neonatólogo aconsejarme leer el libro "Duermete niño" de Estivil para que dejase llorar a mi hijo sin hacerle el menor caso, poco después descubrí que lo que le hacía llorar a mi hijo era el hambre, no tenía suficiente con lo que tomaba, cuando le empecé a dar más el llanto cesó.

En estos tiempos es frecuente ver como los padres escuchan mucho más a cualquiera menos a sus hijos, porque no hace falta que tu bebé no sepa hablar, el lenguaje entre madre e hijo es mucho más antiguo que el habla y este tipo de libros y teorías nos alejan de esto, la comunicación y el instinto maternal.

Por eso hoy quiero que le presteis especial atención a este hombre, Carlos González y a su libro "Bésame mucho" y a este fragmento del libro que dejo;


El último tabú

Nuestra sociedad parece muy tolerante porque muchas cosas que hace cien años estaban prohibidas se consideran ahora completamente normales. Pero si nos fijamos mejor, también hay cosas que hace cien años eran normales y que ahora están prohibidas. Tan completamente prohibidas que hasta nos parece normal que sea así, tan normal como a nuestros bisabuelos les debía parecer su sistema de tabúes y prohibiciones.
Muchos de los antiguos tabúes se referían al sexo; muchos de los actuales se refieren a la relación madre-hijo, para desgracia de los niños y de sus madres. Por ejemplo, la palabra «vicio» se usa ahora en una forma totalmente diferente a como la usaban nuestros abuelos. Casi todo lo que entonces era «vicio» ha dejado ahora de serlo. Beber, fumar o jugar son ahora enfermedades (alcoholismo, tabaquismo, ludopatía), con lo que el pecador se ha convertido en víctima inocente. La masturbación el «vicio solitario» que tanto preocupaba a médicos y educadores) se considera normal. La homosexualidad es simplemente un estilo de vida. Hablar de vicio en cualquiera de esos casos se consideraría hoy un grave insulto.

Hoy en día, sólo se llama vicio a algunas inocentes actividades de los niños pequeños: «Tiene el vicio de morderse las uñas. » «Llora de vicio. » «Si lo coges en brazos, se va a enviciar. » «Lo que pasa es que está enviciado con el pecho, y por eso no se come la papilla. » Si todavía tiene dudas sobre cuáles son los verdaderos tabúes de nuestra sociedad, imagine que va a su médico de cabecera y le explica una de las siguientes historias:


1) «Tengo un niño de tres años y vengo a ver si me hace la prueba del sida, porque este verano he tenido relaciones sexuales con varios desconocidos. »
2)«Tengo un niño de tres años y fumo un paquete al día. »
3)«Tengo un niño de tres años; le doy el pecho y duerme en nuestra cama. »


¿En cuál de los tres casos cree que su médico le echaría la bronca? En el primer caso, le dirá «ah, bueno» y le pedirá la prueba del sida sin pestañear; todo lo más le recordará educadamente la conveniencia de usar el preservativo, lo mismo que en el segundo caso le explicará que el tabaco no es bueno para la salud (y si el médico también fuma, no le dirá nada de nada). Nadie la increpará: «¡Pero qué descaro, cómo se atreve, una mujer casada, una madre de familia!» ¿Y en el tercer caso? Conozco una historia real. Cuando la psicóloga de la guardería se enteró de que Maribel estaba dando el pecho a su hijo de dieciséis meses, la citó para explicarle que si no lo destetaba inmediatamente su hijo sería homosexual (uno no sabe si asombrarse más de los prejuicios contra la lactancia o de los prejuicios contra la homosexualidad). Como Maribel persistió en su «peligrosa»actitud, la psicóloga llamó a su casa para hablar directamente con su marido y advertirle del daño que su esposa estaba haciendo al hijo de ambos.

Nuestra sociedad, tan comprensiva en otros aspectos, lo es muy poco con los niños y con las madres. Estos modernos tabúes podrían clasificarse en tres grandes grupos:

— Relacionados con el llanto: está prohibido hacer caso de los niños que lloran, tomarlos en brazos, darles lo que piden.
— Relacionados con el sueño: está prohibido dormir a los niños en brazos o dándoles pecho, cantarles o mecerles para que duerman, dormir con ellos.
— Relacionados con la lactancia materna: está prohibido dar el pecho en cualquier momento o en cualquier lugar; o a un niño «demasiado» grande.

Casi todos ellos tienen una cosa en común: prohiben el contacto físico entre madre e hijo. Por el contrario, gozan de gran predicamento todas aquellas actividades que tiendan a disminuir dicho contacto físico y a aumentar la distancia entre madre e hijo:

— Dejarlo solo en su propia habitación.
— Llevarlo en un cochecito o en uno de esos incomodísimos capazos de plástico.
—Llevarlo a la guardería lo antes posible, o dejarlo con la abuela o mejor con la canguro (¡las abuelas los «malcrían»!).
—Enviarlo de colonias y campamentos lo antes posible durante el mayor tiempo posible.
—Tener «espacios de intimidad» para los padres, salir sin niños, hacer «vida de pareja».

Aunque algunos intentan justificar estas recomendaciones diciendo que es «para que la madre descanse», lo cierto es que nunca te prohiben nada cansado. Nadie te dice: «No friegues tanto, que se malacostumbra a tener la casa limpia», o «Irá a la mili y tendrás que ir tú detrás para lavarle la ropa». En realidad, lo prohibido suele ser la parte más agradable de la maternidad: dormirle en tus brazos, cantarle, disfrutar con él. Tal vez por eso, criar a los hijos se hace tan cuesta arriba para algunas madres. Hay menos trabajo que antes (agua corriente, lavadora automática, pañales desechables… ), pero también hay menos compensaciones. Enuna situación normal, cuando la madre disfruta de la libertad de cuidar a su hijo como cree conveniente, el bebé llora poco, y cuando lo hace su madre siente pena y compasión («Pobrecito, qué le pasará»). Pero cuando te han prohibido cogerlo en brazos, dormir con él, darle el pecho o consolarlo, el niño llora más, y la madre vive ese llanto con impotencia, y a la larga con rabia
y hostilidad («¡Y ahora qué tripa se le ha roto!»).


Todos estos tabúes y prejuicios hacen llorar a los niños, pero tampoco hacen felices a los padres. ¿A quién satisfacen, entonces? ¿Tal vez a algunos pediatras, psicólogos, educadores y vecinos que los propugnan? Ellos no tienen derecho a darle órdenes, a decirle cómo ha de vivir su vida y tratar a su hijo.
Demasiadas familias han sacrificado su propia felicidad y la de sus hijos en el altar de unos prejuicios sin fundamento.

¿Y tú? ¿Qué quieres ser de mayor?

Coincidiendo con la última frase célebre aportada en el blog, encontré una noticia que me resultó bastante graciosa. Esta hablaba, entre otras cosas, sobre la profesión que esperan desempeñar cuando sean mayores los niños españoles que hoy tienen entre 4 y 16.

Las respuesta a la eterna pregunta, obtenida gracias a un estudio realizado entre 2000 pequeñajos con y sin discapacidad por la empresa de trabajo temporal Adecco, resulta, obviamente, de lo más predecible: la profesión más deseada entre los niños es la de deportista (obteniendo esta un 30% en las encuestas y el fútbol concretamente un 18%), mientras que la mayoría de las niñas (el 26,1%) prefieren ser maestras.

Entre los trabajos más populares también se encuentran los de artista, médicos veterinario, explorador, cómico, caballero, astronauta, ninja, luchador, agricultor, jardinero o peluquera.

Foto: Tom Arma | Extraída de su Página Web oficial.

Lo cierto es que nuestros pequeños no son demasiado ambiciosos y por ello, de momento, son pocos (concretamente dos de los 2000 encuestados) los que quieren entrar en el mundo de la política: uno, procedente de Castilla y León, quiere ser presidente del Gobierno, y otro, alcalde de Albacete.

No es nada raro que los niños se decanten por las profesiones más tradicionales ya que, según Beatriz Becerro de Bengoa (consejera editorial de la revista digital 'Salud Mental" y psicóloga), estas elecciones se deben a que los más pequeños aún se encuentran en un proceso de maduración en el que construyen su realidad a partir de lo que ven. Por eso, el deporte y los animales son sus principales apuestas para el futuro ya que forman parte de su día a día.

Quizás lo que más llama la atención del tema en esta ocasión es que el 93% los niños españoles no quieren ser como sus padre y tan sólo existe un 7% de niños que sí quieren seguir los pasos de sus padres.

Con todos estos datos en la mano, además de preguntarme si coinciden con lo que quieren ser vuestros hijos de mayores, ha sido inevitable que se me viniera a la mente que todos hemos sido pequeños y, por lo tanto, también teníamos nuestras profesiones predilectas, así que no puedo evitar la otra pregunta de rigor:

¿Y tú? ¿Qué querías ser de mayor? ¿Lo conseguiste o trabajas en un gremio completamente diferente?

Los SMS pueden afectar al desarrollo cognitivo de los niños

La cifra de menores que utilizan el teléfono móvil es cada vez más sorprendente: actualmente asciende a un 94%, un fenómeno que hace que la preocupación por los posibles efectos adversos que pueden ocasionar los telefónos móviles en nuestra salud (y muy particularmente en la suya) se vuelva más patente con el tiempo.

Según apuntan las últimas investigaciones al respecto, parece ser que no sólo debemos tener en cuenta el daño que nos pueden llegar a producir sus ondas al tener el aparato demasiado cerca de nuestro cerebro, sino que parece ser que también los SMS (mensajes de texto) pueden estar causando un importante daño en el desarrollo cognitivo de nuestros pequeños.

Un estudio desarrollado por investigadores australianos en el que se analizaron a 317 jóvenes de entre 11 y 14 años, detectó que los niños que usan mucho los mensajes de texto de los teléfonos móviles son "más rápidos, pero menos precisos" a la hora de resolver determinados problemas.


Para llegar a sus conclusiones, pidieron a los pequeños que respondieran una batería de preguntas. Los niños que más utilizaban el teléfono, y en especial los mensajes predictivos (el modo que completa automáticamente las palabras) terminaban los cuestionarios más rápido, pero con más respuestas incorrectas.

Según el responsable del estuido, este fenómeno puede producirse poruqe al estar acostumbrado a tipear unas letras y que la palabra se complete sola, tendemos a esperar que todo funcione así.

Así pues, teniendo en cuenta las opiniones del explerto, tal vez deberíamos tratar que, en caso de que nuestros hijos utilicen demasiado el móvil para enviar SMS's, tengan siempre el diccionaro del terminal desactivado para que al menos tengan que eforzarse en teclear todas las letras.


Quiero ser un niño


"He llegado por fin a lo que quería ser de mayor: un niño".


Foto: José Ángel Sánchez | Vista en Google Imágenes.
Frase:
Joseph Heller (novelista estadounidense).

Nace la primera niña con dos madres biológicas en España

El pasado sábado, Lluna venía al mundo en Valencia.

Su nacimiento sería meramente anecdótico si no fuera porque se trata de la primera niña que tiene dos mamás biológicas gracias a un proceso de donación de ovocitos.

Mónica y Verónica muestran orgullosas la ecografía de su bebé.

Y es que, Mónica y Verónica, dos jóvenes mujeres valencianas que han visto cumplido su sueño tras un largo proceso de fecundación, han sido pioneras (junto otras 16 parejas de lesbianas) al someterse a una técnica llamada Ropa (Recepción de óvulos de la pareja) para poder condebir un hijo biológico.

La explicación de la técnica es sencilla: una de las dos mujeres aporta el ovulo, que es fecundado con semen de donante, y la otra lo recibe en su útero.

Se trata de un proceso muy largo en el tiempo y caro (cuesta 5000€ exactamente) al que puede someterse cualquier mujer que sea mayor de edad, aunque es recomendable que las mujeres que vayan a donar su óvulo, para que sea fecundado, lo hagan antes de los 40 años mientras que las que vayan a llevar a cabo el proceso de fecundación lo pueden hacer sin problemas hasta los 50 años.

Nada médicamente nuevo, aunque socialmente representa toda una revolución.

Por eso mismo no faltan quienes critican este método de ferilidad, supongo que más por el hecho de estar destinado principalmente a mujeres homosexuales que por otras razones.

Lo que nos gustaría saber aquí es tu opinión al respecto:

¿Te parece bien esta nueva técnica de fertilidad?

¡Permite a tu hijo que se manche!

La siguiente escena excelentemente recreada por Mamá de Lola (cuyo blog recomiendo), aunque ridícula, es muchísimo más frecuente de lo que nos pensamos.


Por esta misma causa, el Ayuntamiento de Lovaina (al noreste de Bélgica) ha iniciado una campaña para concienciar a los padres de la ciudad de que los niños deben ir vestidos de manera informal, para que puedan jugar sin miedo a mancharse.

Se ha comprobado que muchos niños se niegan a participar en las actividades de las colonias de verano organizadas por el Ayuntamiento por temor a ensuciarse la ropa ya que, al parecer, muchos padres envían a sus hijos a jugar con la "ropa de domingo" y luego se enfadan si los chavales llegan a casa con manchas.

Por eso, la responsable local del área de Juventud y Familia, Karin Brauwers, ha señalado que los niños que acuden a estas actividades deberían poder jugar tranquilamente en el barro y no estar preocupados por si tienen manchas en la ropa.

Ni que decir tiene que concuerdo totalmente con la opinión de esta mujer y desde aquí animo a todo el mundo a dejar que sus hijos jueguen libremente sin tener que andar preocupados por el tema de la ropa.

Si no queremos que se manchen ¿no será mejor proporcionarles un atuendo más adecuado?

Semana mundial de la lactancia materna

Bajo el lema "Amamantar salva vidas, también en las emergencias", desde el 1 hasta el 7 de agosto se conmemorará la Semana Mundial de la Lactancia Materna en más de 120 países, con el propósito de enfatizar la importancia del amamantamiento para la salud de las madres y sus hijos.

Aunque el amamantamiento es una práctica extendida en el 90% de los niños, dos de cada tres también reciben otras leches, líquidos o alimentos que deberían ofrecerse después de los seis meses de edad. Por eso el objetivo principal de la promoción de la lactancia es lograr que la leche materna sea el único alimento o líquido que reciban todos los niños hasta los seis meses de edad y, recién entonces incorporar otras bebidas o comidas mientras sigue con la lactancia hasta los dos años.

Una mujer da pecho a su bebé en Hadraibari, India. Este país se encuentra entre aquellos que quieren impulsar este acto como forma de proporcionar salud al infante (foto: AFP).


Este año la iniciativa se relaciona especialmente con las situaciones de emergencias sanitarias que pueden afectar a la población entera, como así también, otras de carácter social o personal que pueden afectar a una sola familia.

Sin ir más lejos, ahora nos encontramos inmersos en una pandemia de gripe A (H1N1) que, entre otras cosas, nos ha obligado a recuperar o reforzar hábitos saludables, como el lavarse las manos o taparse la boca al toser o estornudar. No estaría de más hacernos valorar también la lactancia materna; y es que como ya hemos dicho con anterioridad en este mismo blog, a través de leche materna, la madre transfiere al hijo por medio de esta elementos antivirales inespecíficos que generan anticuerpos y defensas.

En cualquier caso, el mensaje trata de ser muy claro: hay que ofrecer especial apoyo a las madres para que sigan amamantando o puedan volver hacerlo, ya que será lo mejor para sus hijos "mientras dure la emergencia".

Y después, también.